Sus inicios
Trayectoria discografica
Este personaje realiza musica shock rock, esta clase de musica tiene siempre un mismo esquema, guitarras electricas, maquillaje oscuro, camiseta e indumentaria negra, pero este artista quiso romper todos los esquemas haciendo de sus actuaciones un viaje directo a las profundidades del inframundo ayudado no solo por su música y no que también por las repetivas referencias al sexo, drogas y sobre todo a la religuion.
Conciertos
Desde los inicios del grupo la tematica y el estilo a ido varienado con el tiempo por las diferentes maneras que tienen de promocionar sus nuevos discos. Siempre an estado muy presente la teatralidad y la controversia
Sus autuaciones an sido muy criticadas por su antireligioso combinado con el choque que le da su canatnte.
A lo largo de los años esta se ha embarcado en quince giras a través de Oceaía, Europa, Asia y Ameríca, de las cuales tres de ellas fueron nacionales, nueve internacionales y otras tres en conjunto con otros artistas.
Proyectos actuales
Es conocido actualmente como cantante, pero desde hace ya poco tambien por su trabajo cinematrografico con la pelicula Wrong cops. Además paticipo en su banda sonora. La pelicula trata de policias que estan metidos en trbajos ilegales.
Entre los planes futuros de Mason también está participar en la primera edición del Festival Alt-Fest, a realizarse en el Reino Unido los días 15, 16 y 17 de agosto venidero.
Entrevistas
Titulo de entrevista: Marilyn Manson: “Soy el caos, siempre he sido el caos, mi razón de ser es el caos”
Cuando Marilyn Manson se va a dormir, habitualmente ha salido el sol, y cuando se levanta, la noche negra y oscura no suele quedar lejos. En este sentido, igual que en el resto de sentidos, Manson hace lo que quiere. Si quiere sábanas negras en su cama y la temperatura inamovible en unos frescos 18 grados, eso es lo que obtiene.
Otro ejemplo: digamos que quiere hacer el amor en esas sábanas con su novia, la fotógrafa Lindsay Usich, que está tan flaca como la escoba de una bruja y lleva el pelo color negro cuervo. Primero, no debe haber ninguna luz encendida:
“Soy muy tímido, pese a lo que puedas pensar”, dice. Segundo, la ropa
interior no debe deslizarse más abajo de sus tobillos: “Tengo la fobia
de que la casa se va a incendiar, y no quiero estar desnudo si eso
ocurre”, cuenta.
Y, por último, cinco es el mínimo absoluto de veces que debe realizarse el “acto sexual” (como él lo
llama) en un día, con diez como reciente pico. Y esto, a los 45 años
-“la edad de un pequeño récord”, dice–, aunque difícilmente parezca
posible.
¿Pero qué parece posible de Manson? Entre otras hazañas, su nuevo álbum, The pale emperor, casi llega a la altura de Antichrist superstar, el
disco de 1996 que le sacó del erial post-grunge de Fort Lauderdale
(Florida) y le llevó, por la vía del shock-rock, hasta la cima, para
desespero de la derecha cristiana, que en 1999 trató de culparle de la masacre del instituto Columbine.
Aunque mientras Antichrist superstar era suciedad siniestra e industrial, The pale emperor es bluesy, con mucho sintetizador, bastante adecuado para sonar en la radio y repleto de extraños gritos y tormentos,
incluido el frenético chillido agudo de unos coyotes royendo una presa.
La mayoría de las canciones, incluido el reciente single Third day of a seven day binge, se grabaron en una toma, ignorando subsiguientes propuestas para limpiarlas. “Es sucio”, dice feliz Manson, “como la suciedad debajo de mis uñas, como alguien que ha cavado una tumba”.
Ahora mismo, lo que ha excavado es
un refresco de uva Sunkist del frigorífico en su pequeña y oscura casa
de estilo gótico español en las colinas de Holywood. Lo abre, echa un
poco en el vaso y no vuelve a tocarlo. Luego paseamos por la casa, mientras señala sus pertenencias más significativas. Hay un montón de libros infantiles (This little piggy, Winnie the Pooh).
Un bote sin usar de Zyklon B, el gas venenoso que Hitler usó para
exterminar judíos. Una pistola y un rifle en la mesita de café. Un
valioso cuadro de un payaso, pintado por el violador y asesino en serie
John Wayne Gacy. Básicamente, lo que uno esperaría de un tipo como él.
En el piso
de arriba, tras la puerta cerrada de un dormitorio, está Usich y su
pelo de cuervo. Manson anuncia que ella no va a bajar esta noche. Tal vez tengan algún problema en su relación. Tal vez ella no entienda que cuando él escribe una canción como la nueva The devil beneath my feet, con letras como “no traigas tu corazón negro a la cama / cuando me levante espero que estés desaparecida o muerta”, no se está refiriendo necesariamente a Usich, aunque son frases de un SMS que le mandó a ella.
Esta noche, Manson
se ha puesto una camisa negra, un chaleco negro, una abrigo negro,
pantalones negros y botas negras sobre calcetines rojo-sangre,
con unas gafas de sol cubriéndole los ojos en una habitación tan oscura
que su cabello negro, afeitado corto y asimétrico, casi deja de existir
en ese ambiente general de negra nada. Se mueve con una elegancia
relajada y espectral, con los dedos revoloteando como un pájaro cuando
señala hacia una antigua silla para practicar abortos que una temporada
cubrió con una piel de castor que le regalaron Angelina Jolie y Brad Pitt. “La llamaba la Montaña del Castor”, dice, “y sobre ella tuve sexo con ciertas personas que puede o no que hayan provocado mi divorcio”. Piensa brevemente sobre esto y veo que ya está preparando un comentario posterior. Espera a que llegue. Espera. Llega. “Al castor no hay que temerlo”, dice.
Luego se escuchan unos pasosdiscos